Aburguesamiento y formación de guetos urbanos

Lun, 15/11/2021 - 20:25

Edificio La Colonial, Calle 10 , Rio Abajo

barracas
Autor:

Gregorio de Gracia/Periodista*Imagen: miviot.gob.pa

 

En los últimos 40 años, el Casco Antiguo de la ciudad de Panamá ha experimentado un aburguesamiento, acompañado de la formación de guetos urbanos en la periferia. Dos caras de la moneda, manifestaciones de un mismo proceso, expresó el Mgter. Azael Carrera, encargado del Centro Latinoamericano (CELA).

El Casco Central de la ciudad de Panamá, que actualmente se extiende desde San Felipe y abarca Pueblo Nuevo, Betania, Parque Lefevre hasta algunas partes de Rio Abajo, ha pasado por un proceso de aburguesamiento, es decir, la ocupación de esos espacios por sectores de altos ingresos. Mientras que la periferia urbana está recibiendo personas que en otros tiempos fueron residentes del centro de la ciudad, expresó.

Para el sociólogo y docente de la Universidad de Panamá, la salida de sectores de bajos ingresos y su reemplazo por sectores de altos ingresos se debe prácticamente a un proceso de mecanismo y apropiación de riquezas, específicamente, de las ventas por parte de la industria de la construcción y su alianza con el sector financiero.

Espacios urbanos

Entonces, básicamente lo que experimenta la ciudad de Panamá hace que el espacio urbano esté socialmente dividido, a razón de que grupos de altos ingresos se ubican en el centro de la ciudad y los de bajos ingresos en la periferia urbana, indicó.

El profesor Carrera subrayó que la periferia urbana tiene una serie de indicadores sociales, por ejemplo, si usted lo contrasta con los que tiene el centro: criminalidad, desempleo, informalidad, se va a dar cuenta de dos polos: en el centro la riqueza y hacia afuera la pobreza.

En el área central de la ciudad aún viven moradores en sectores populares como El Chorrillo, La Locería, La Exposición, Calidonia y Curundú, zonas que en estos momentos son codiciadas por el capital financiero inversionista, todo eso es un proceso de renovación urbano, que va acompañado por un desalojo de la población, acotó.

Expresó, usted puede ver en las noticias que hay gente que se opone a los procesos de renovación urbana, sobre todo, porque eso va acompañado de desalo del centro hacia afuera de la ciudad.

Capital de inversiones

Todas estas zonas están siendo codiciadas por el capital de inversiones, pero la única manera de que esas poblaciones, de estratos bajos, se mantengan en el centro de la ciudad y resistan la avanzada del capital, es a través de las organizaciones populares que reclamen su derecho de habitar en la ciudad, destacó.

El profesor Carrera explicó que, si revisamos las fuentes estadísticas, el índice de pobreza multidimensional, según las últimas mediciones sobre las carencias en Panamá, y otros indicadores sociales como la tasa de criminalidad, hurto, pobreza, desempleo e informalidad, vamos a ver que se encuentran localizadas, hay una concentración de este tipo de indicadores que expresa un empobrecimiento en la periferia y un mejor desempeño en el centro de la ciudad. Las diferencias entre el centro y la periferia son abismales.

El resultado de las políticas de desalojo es la formación de una cultura del gûeto urbano en la periferia, concluyó el profesor.

Traslado

En cuanto a los terrenos de la UP y áreas urbanas de Viejo Veranillo, reveló que en varias administraciones gubernamentales pasadas surgió la idea del traslado de este centro de estudios hacia otros puntos de la ciudad.

Informó que los terrenos de la UP son valorados por el capital, es decir, por los inversionistas del sector financiero. En cierta medida, las administraciones han presionado para tratar de trasladar la UP hacia otros espacios y utilizarlos para la inversión privada, el incentivo y el desarrollo urbano.

“No nos ha de extrañar que estos lugares, de un momento a otro, reciban presiones de distintos sectores para tratar de reubicarse en otras zonas, con miras a cederlos para desarrollar cualquier tipo de proyectos”, agregó.

Reubicación

Sostuvo, ¨en cierta medida, los universitarios debemos estar en pie de guerra, resistir a estas propuestas y resaltar el papel y carácter de una universidad popular abierta y que, como tal, merecemos una buena ubicación que facilite la integración de los diferentes grupos sociales que vienen aquí¨.

En caso de ubicarnos en otra zona de la ciudad, aumentarían los costos de traslado y tiempo, ya que esta es una zona bastante accesible, donde hay alquileres para las personas que vienen del interior a estudiar, eso afectaría de manera negativa a los estudiantes, incrementando costos de transporte y tiempo, no es monetario, pero representa un costo que podría afectar en termino de alojamiento y transporte, agregó.

Puntualizó que el Estado, a través del ordenamiento territorial, puede impactar, atenuar estas desigualdades sociales, pero desde la academia es necesario presionar para que la ciudad se planifique, siempre pensando en beneficio de la mayoría.