
Flor María Muñoz Bañales | Enlace cultural Panamá-Francia
José Garrido, estudiante panameño de danza en la Codarts Rotterdam- University of the Arts en los Países Bajos. Nació en Chitré, a los 2 años se mudó al corregimiento de Santa Ana, con su abuela, quien se hizo cargo de su educación.
Garrido es un joven divertido con mucha energía que disfruta con gran pasión todo lo que hace, ama los retos, es un soñador que trabaja fuerte por lo que desea, le gusta escuchar a los demás, especialmente a su abuela quien es su gran inspiración. Tiene una manera peculiar de ver los problemas o situaciones difíciles con optimismo, aprendiendo a lidiar con ellos de manera reflectiva. Fiel creyente de que a través de las acciones y talentos se puede crear un gran impacto positivo en la sociedad.
En esta semana, el Semanario La Universidad conversó con este joven, promesa de la danza, que busca concientizar al resto, de vivir siendo cómplice de lo fascinante del arte en todas sus versiones.
Estudios
Se graduó de Bachiller en Ciencias en el glorioso Nido de Águilas, Instituto Nacional y culminó un semestre en la carrera de Arquitectura en la Universidad de Panamá, antes de partir a los Países Bajos, donde actualmente se encuentra iniciando su tercer año como bailarín profesional.
Descubrimiento de Codarts
Comentó que, una de sus maestras viajó a los Países Bajos para visitar la Universidad Codarts. Al regresar le comentó a la directora del departamento de Danza acerca de este centro de estudios y se buscó la posibilidad de aplicar por video y por una beca internacional. Se informó de su programa de carrera que le pareció fabuloso y así inició una ardua preparación.
Experiencia en los Países Bajos
Expresó, “la ciudad, las bicicletas y el clima fueron las cosas que me causaron un gran impacto. Luego de sentirme en un sueño, después de dos semanas en el país sentí que estaba iniciando la gran aventura de vivir y estudiar en Europa”.
Nuevo idioma
El idioma desde el inicio fue un problema porque no dominaba el inglés ni el holandés, le fue muy difícil interactuar y comunicarse, la Universidad ofrecía a los estudiantes cursos de inglés. Aprendió palabras básicas en holandés para dar una buena impresión. Ha estudiado italiano y un poco de francés.
Lo que extraña de Panamá
Extraña a su abuela, quien es su todo, tenerla cerca siempre le da seguridad. Extraña a sus amigos y a los chicos del Programa Enlaces, quienes también son como su familia. El calor ya que para él en los Países Bajos hace frío todo el año y por supuesto la gastronomía panameña.
Proyectos
Actualmente, trabaja en un evento en los Países Bajos para el Programa Enlaces. Quiere que su labor y compromiso con la niñez y juventud en su país continúe beneficiando a muchos más. Le gustaría formar parte de compañías de danza en Europa, luego, iniciar como coreógrafo; más adelante compartir y ofrecer su talento en Panamá.
Sentimientos
Siempre se ha dicho a él mismo que “está donde debe estar, en el corazón del mundo”. Los Países Bajos le ha enseñado tanto y al mismo tiempo él lo ha contagiado con su sabor panameño.
Siente que todos podemos generar impactos y crear cambios desde nuestra posición y él, como bailarín y artista, tal vez no pueda detener una guerra, pero pueda utilizar su talento de creación coreográfica para llevar al espectador a diferentes escenarios enrevesados, y hacerlos fáciles de entender, para cuestionar, proponer, disminuir y evitar su presencia.
Al cierre, José dijo “no soy solo un bailarín, soy más que eso, soy un artista que utiliza su cuerpo para indagar el verdadero significado de “dar””.