Reiner Tuñón/Director de RRPP
A Lydiar Tár la amas o la cancelas por su genialidad, pasión y desenfreno. Esta afamada artista, la primera mujer directora de la Orquesta Filarmónica de Berlín, está a punto de grabar una sinfonía que supondrá la cúspide de su carrera. En el camino, somos testigos de su ascenso y desplome mientras nos ofrecen -en la gran pantalla- un retrato crítico muy detallado de sus obsesiones, mitos y encantos, abriendo cada capa en la vida de nuestra protagonista.
Tár es el tercer filme de Todd Field, el aclamado director de En la habitación con Sissy Spacek y Pequeños Secretos con Kate Winslet. Tenía 15 años de espera para realizar una nueva película y encontró el momento perfecto para entregar un estudio de personaje que suelta matices de lo que hoy en día tratamos a diario desde las complejidades del medio digital y la cultura que se envuelve en estas realidades.
La multipremiada actriz australiana Cate Blanchet (con 2 premios Óscar por El Aviador de Martin Scorsese y Blue Jasmine de Woody Allen) se mete en la piel de Lydia Tár, y la respuesta de los críticos y público que ha tenido la oportunidad de ver este filme ha sido unánime: la mejor actuación de este año. Este rol lo definen como el de una exitosa mujer que encarna a una persona que a su vez porta máscaras que vamos descubriendo en la medida en que su carrera se desliza inevitablemente cuesta abajo. De esta manera, vemos en la directora a un victimario y a una víctima que se desata al dirigir música que realmente exige algo de quienes intervienen integralmente en el goce de la música académica y hasta cierto punto erudita.
Ahora, el trabajo de Field en este estudio de personaje no queda solo en mostrar con sinceridad a tiempo real de un complejo carácter. El director crea una atmósfera sensorial que deleita con planos, espacios, marcas, sonidos, ediciones precisas y un manejo exquisito de la dirección de fotografía a cargo del alemán Florian Hoffmeister (Secretos oficiales y Antlers). El filme, que este año ha sido nominado a 6 premios Óscar incluyendo mejor película, director, actriz, edición, fotografía y guion original, más que un ejercicio que cuestiona incluso el discurso identitario y lo contrapone con el trato universal que hace que los clásicos artistas de centurias permanezcan vitalicios por sus creaciones, es un fiel ejercicio al servicio de la extraordinaria Cate Blanchet, que nos pone a reflexionar sobre el poder y las consecuencias de administrarlo en medio de una sociedad que busca héroes y villanos.